Descripción
Tras la noche desaparecida
(Dedicado a Halold Pinter)
Tras la noche desaparecida quizá el sueño
de Escipión cobre vida en tu pálido portal.
Solitaria fosa de almohadas húmedas y algas
con las que alimentamos la torre sin ojos.
Dentro de este telón del inverno-ausente
hemos construido “un hogar para la muerte”.
Solo falta el feliz acorde del trasnochado
Apolo para disfrazar a este anónimo héroe.
Lo haremos con viejos periódicos y recortes
de guerra recicladas en viejas papeleras urbanas.
Confiscaremos árboles de alambre y otras telas
para someterlas a las corrientes siberianas.
Será como quiera que la noche desaparecida
nos encuentre en este lugar de funestas canciones.