Las estaciones, de Antonio Varo Baena
Descripción
LAS ESTACIONES
Hubo un tiempo sin relojes
en que las estaciones del año
marcaban el ritmo de la vida.
La primeras lluvias del otoño,
la flor verde de la primavera,
los amaneceres del verano
y las tinieblas en el invierno,
forjaban el quehacer y la dicha.
No era mejor aquel tiempo
que el que nos toca vivir ahora,
la vida siempre es dolor, demora,
es hoguera y son cenizas.
Mas la soledad era siempre menos sola
con los árboles que nos miraban
y cobijaban bajo sus copas,
y los olivos sedientos
acechando con sus sombras,
lindando el color de las viñas,
cercaban a las veredas rotas.
El gañán y el jornalero
levantaban el sol de las bestias
cuando se marchaban a la poda
y la hatería a la quinzada
era la primera fiesta.
El arriero y la vendimiadora
andaban entre terrones
con la pausa de las horas,
cansados y a veces tristes
con sus sueños y sus derrotas.
Ese tiempo ya no volverá,
pero quedará en la memoria.