Descripción
2.- EL CEBO
Da igual. Deja de rasgar…papeles, me dices.
Dependencia y distancia,
borrarse del cuadro y desdibujarse en una misma,
de una misma.
Vorágine anímica que se agarra a las venas,
palabras sañudas
y con señuelo
afectivo.
El pensamiento atado a la emoción,
daña: Afinar y acertar.
A vueltas con la realidad y la apariencia.
La misma púa: lo que suena y lo que se imagina,
la vida es la vida solo, porque
el corazón poco responde,
y menos alivia.
Tapar bocas,
quererse a sí mismo.